Cómo lograr que tu corazón no domine a tu cerebro
La inteligencia emocional tiene que ver con las habilidades personales… no es un aprendizaje académico sino un aprendizaje vital que pretende aunar lo que siente tu corazón y lo que dicta tu cerebro.
Se trata de encontrar ese equilibrio que te permita manejarte a ti mismo y a tus relaciones. Saber lo que sientes y como lo sientes, gestionar tus metas y ser positivo ante los contratiempos. Ser empático con los demás, entender su lenguaje en todos sus niveles, manejar bien las relaciones, persuadir, saber comunicar y escuchar. En definitiva, nuestra capacidad para adaptarnos al entorno, comprendiendo lo que ocurre a nuestro alrededor a partir de entendernos a nosotros mismos y a los demás.
Un buen autocontrol emocional nos permite reflexionar y dominar nuestros sentimientos, para no dejarnos llevar por ellos ciegamente y saber cuándo hay que contrarrestarlos con lo que dicta nuestra cabeza. Consiste en saber detectar las dinámicas emocionales, saber cuáles son efímeras y cuáles son duraderas, así como en ser conscientes de qué aspectos de una emoción podemos aprovechar y de qué manera podemos relacionarnos con el entorno para restarle poder a otra que nos daña más de lo que nos beneficia.
Por poner un ejemplo, no es raro que nos enfademos con nuestra pareja, pero si fuéramos esclavos de la emoción del momento estaríamos continuamente actuando de forma irresponsable o impulsiva, y luego nos arrepentiríamos. En cierto sentido, buena parte de la regulación de las emociones consiste en saber utilizar nuestra mente para gestionar el foco de atención, de manera que no se vuelva contra nosotros y nos sabotee.
Desde enCalma te podemos ayudar a gestionar y racionalizar tus emociones haciéndote conocedor de cómo utilizarlas para una vida más saludable… porque tu corazón no debe vivir al margen de tu cerebro.